Plot.
Año 2016.
Hasta ahora, la colaboración y convivencia entre diversas especies del submundo era prácticamente impensable. Demasiados intereses de por medio, demasiadas cadenas alimentarias que cumplir.
Sin embargo, toda esa rutina de caos y enfrentamientos está a punto de cambiar.
Una noche, el Alfa de cada clan recibió un misterioso mensaje, en el que se les llamaba a citarse en una misteriosa isla escondida en el Océano Atlántico. Los diez alfas, bravos, valientes y orgullosos de su naturaleza, decidieron acudir a aquella extraña llamada.
Pero jamás regresaron con los suyos.
Diez días después de su desaparición, todos recibieron una segunda carta:
“Diez clanes. Diez alfas. Diez muertes. Si queréis evitarlas, acudid a Hellheim Port a las 22H.”
Todo giraba entorno al Diez. Entorno a la supervivencia de la especie.
Los Alfas dieron todo por sus clanes tiempo atrás, pero, ¿estarán éstos dispuestos a dar todo por sus superiores?
NOTA PARA LOS USUARIOS QUE AYUDA A COMPRENDER MEJOR LA TRAMA: Los personajes desconocen algunas partes de la siguiente información, así que por favor, tenedlo en cuenta. Los alfas fueron citados a la isla sin saber bien qué iban a hacer allí, sólo centrados en la posibilidad de acabar con las disputas entre clanes que la carta prometía, así que a pesar de lo extraño del asunto, el orgullo los llevó a aceptar la invitación. Una vez en Devon Island, encontraron una mansión en el centro del terreno. Alrededor de ésta, había casas, parques y piscina, como una pequeña ciudad para reunirlos a todos. Pero nadie los estaba esperando allí. ¿Quién mandó la carta entonces? A pesar de que los alfas están buscando respuestas y desconocen el remitente, quien la ha mandado oculta planes oscuros que cambiarán drásticamente el futuro de las manadas. Menteith, un conocido nigromante que años atrás fue encerrado por los diez jefes, ha regresado más fuerte que nunca. Su lista de deseos recoge "diez corazones", el por qué es desconocido por ahora. El hombre desea jugar con las criaturas sobrenaturales como si fueran sus piezas de ajedrez antes de dar los golpes definitivos que lograrán hundir el tablero. Si es que lo consigue.
Hasta ahora, la colaboración y convivencia entre diversas especies del submundo era prácticamente impensable. Demasiados intereses de por medio, demasiadas cadenas alimentarias que cumplir.
Sin embargo, toda esa rutina de caos y enfrentamientos está a punto de cambiar.
Una noche, el Alfa de cada clan recibió un misterioso mensaje, en el que se les llamaba a citarse en una misteriosa isla escondida en el Océano Atlántico. Los diez alfas, bravos, valientes y orgullosos de su naturaleza, decidieron acudir a aquella extraña llamada.
Pero jamás regresaron con los suyos.
Diez días después de su desaparición, todos recibieron una segunda carta:
“Diez clanes. Diez alfas. Diez muertes. Si queréis evitarlas, acudid a Hellheim Port a las 22H.”
Todo giraba entorno al Diez. Entorno a la supervivencia de la especie.
Los Alfas dieron todo por sus clanes tiempo atrás, pero, ¿estarán éstos dispuestos a dar todo por sus superiores?
NOTA PARA LOS USUARIOS QUE AYUDA A COMPRENDER MEJOR LA TRAMA: Los personajes desconocen algunas partes de la siguiente información, así que por favor, tenedlo en cuenta. Los alfas fueron citados a la isla sin saber bien qué iban a hacer allí, sólo centrados en la posibilidad de acabar con las disputas entre clanes que la carta prometía, así que a pesar de lo extraño del asunto, el orgullo los llevó a aceptar la invitación. Una vez en Devon Island, encontraron una mansión en el centro del terreno. Alrededor de ésta, había casas, parques y piscina, como una pequeña ciudad para reunirlos a todos. Pero nadie los estaba esperando allí. ¿Quién mandó la carta entonces? A pesar de que los alfas están buscando respuestas y desconocen el remitente, quien la ha mandado oculta planes oscuros que cambiarán drásticamente el futuro de las manadas. Menteith, un conocido nigromante que años atrás fue encerrado por los diez jefes, ha regresado más fuerte que nunca. Su lista de deseos recoge "diez corazones", el por qué es desconocido por ahora. El hombre desea jugar con las criaturas sobrenaturales como si fueran sus piezas de ajedrez antes de dar los golpes definitivos que lograrán hundir el tablero. Si es que lo consigue.